Embarazo y endometriosis


Hace ya un tiempo que no escribo y la razón es el título de este post. Me encuentro gestando una pequeña vida. No escribí antes entre los cambios y la frontera tenebrosa del primer trimestre y aunque una sienta que todo va bien, los primeros meses son un enigma. Está siendo un viaje tranquilo y transformador, una experiencia única, misteriosa y muy mágica. No he tenido ni un solo problema derivado de la endometriosis. Este bebé es sueño y sanación y nos estamos protegiendo mutuamente en este nido. Se me hace tan raro no menstruar desde hace meses! Se agarró bien a mi cuerpo-casa, su hogar que le arropa y nutre cada día y vino para sanar también mis heridas, espantar mis fantasmas, todas esas sombras y traer mucha luz a mi/nuestro mundo.

El motivo de este post también es animar a todas las que estáis pasando por la endometriosis y que deseáis un embarazo, a no desistir en vuestro sueño de intentarlo. A mi me dijeron que tenía que pasar un año o año y medio para empezar a plantearnos la posibilidad de infertilidad/esterilidad y mirar otras opciones (congelar ovocitos, operación...). Pero la verdad es que, por suerte, lo nuestro fue bastante rápido. Fijaros que en la primera entrada del blog mencioné nuestra idea de internarlo ya desde principios de año y sin darnos cuenta estamos ya de 7 meses! A pesar de este año raro que nos ha tocado de COVID19 y con el inconveniente de que mi pareja no puede entrar a las consultas (por el sistema público de salud) y se está perdiendo esa parte aunque intentamos cubrir el vínculo de otras formas y al final tiramos de un gine privado para que al menos una vez viviese el mundo mágico que albergo y que es su mundo también.

Pero también es verdad que cada endometriosis es un mundo. Que no es fácil para todes que es un proceso y que como todo proceso hay que transitarlo y que hay momentos difíciles cuando estás esperando, la espera es eterna y cuando llegan molestias y la sangre derrama por el cuerpo una lo siente como un fracaso, una pérdida y una invasión de tristeza que lo inunda todo. Intentas llevarlo lo mejor que puedes pero la realidad es que buscar un embarazo no es tan idílico como lo pintan, fluir cuesta, te culpas y culpas al cuerpo como si estuviese defectuoso, afloran los miedos e inseguridades y más aún cuando llevas la carga de la endometriosis a tus espaldas, con todas las connotaciones que eso conlleva. Te asaltan palabras como cuchillos que ya escuchaste en manos de otras personas que lanzan sobre nosotras también sus propios miedos y nos desestabilizan. "No vas a poder..." "Se va a ir comiendo tu carga ovárica..." "No va a ser de forma natural..." "Infertilidad..." son frases monstruo que en vez de crear puentes, los derrumban, derrumbándonos a nosotras también. Empecemos a construir palabras y mensajes que sean puente, camino, esperanza.

Por supuesto muchas veces lo hacen incosncientemente, no les guardo rencor, pero a más de una ginecóloga que me aconsejó congelar ovocitos yo entiendo le asustaba la endometriosis más que a mi y proyectó en mi una inseguridad que tuve que trabajarme. Pero otras gines eran más de la opinión de esperar, quizás por mi edad (32) quizás por no ser alarmistas y me pusieron ese año y pico de margen para intentarlo. Por supuesto, descarté congelar cuando en analítica también se ve la reserva ovárica y en mi caso es buena (eso se puede pedir en análisis de sangre porque mide la hormona antimulleriana que determina la carga ovárica restante).

Por supuesto, y como todo con nuestro proceso hablamos de probabilidades y estadísticas. En algunas ocasiones la única opción después de intentarlo por activa y por pasiva es recurrir a reproducción asisitida/in vitro con tus propios ovocitos congelados o con ovodonante o donante de esperma o ambos, o a plantearse la opción de acogida/adopción (algo que mi compañero y yo también nos planteábamos aún sabiendo las dificultades del proceso y los requisitos que piden para adoptar en España...). Tampoco todas las gestaciones llegan a término, hay pérdidas en muchos caminos o gestaciones realmente complicadas a causa de la endo. No todo es un camino fácil pero no por ello dejaremos de perseguir nuestros objetivos ni dejar de intentar mejorar nuestra calidad de vida. La maternidad tampoco es una elección para todes y lo importante es seguir en el camino de la investigación, de la búsqueda y el aprendizaje.

Pero en fin, que cada una también elige la opción u opciones con las que se siente más agusto transitando esta afección y yo, como siempre, lo único que intento es dar mi visión de las cosas y cómo estoy viviendo este proceso, este viaje, esta experiencia. 

No le temo al dolor del parto, porque si algo me ha enseñado esta experiencia es que el dolor se pasa y se puede gestionar de mil maneras. Y hace unos días escribí esto:

Dolor, 

te conozco, 

de otras formas, 

que no son contracción.

Tú no me dabas descanso 

ni pausa durante días y noches. 

Te conozco

agarrado a mis entrañas

Arañando por dentro a tu paso

todo lo que encontrabas.

Pero nunca te tuve miedo.

Te enfrenté.

Aprendí a domarte.

Para que no acabases conmigo.

Para no perder mi norte.

Mi eje. 

Me hiciste más fuerte (aún).

Si algo me trajo este proceso

es un aprendizaje enorme. 

Quizás me tenía que ocurrir

para darme una lección. 

Para enseñarme 

a convivir con el dolor, 

saber que no muero,

o sí,

que mudo la piel

para dar paso a una nueva yo,

la de antes,

la de ahora,

la que vendrá después.

Los caminos se abren paso

siempre hacia delante.

Esta pequeña semilla

 se agarró a mi vientre

esta primavera,

para demostrarme 

que con amor y calma

todo se puede.

Y va a brotar y florecer 

como las mimosas

en pleno invierno.

Vendrá para sanar viejas heridas

y acompañarnos 

en esta experiencia,

en este extraño viaje

que es la vida.

Estaré alejada de las redes, para adentrarme en este nuevo mundo desconocido de la maternidad y crianza pero no por ello me alejo del activismo por la endometriosis que sé que no se acaba con el embarazo ni con la lactancia pero que al menos estará en stand-by un tiempito. Así que volveré (espero) a escribir en este blog en el futuro. No obstante, seguiremos de vez en cuando enlazando cosas interesantes al facebook. Si no nos sigues todavía: hazlo! https://www.facebook.com/unadecadadiez

Un abrazo a todas y una canción 






Comentarios

Entradas populares